lunes, 14 de septiembre de 2009

Hester Prynne

-criatura, que eres? -exclam? la madre-, soy tu peque?a perla-contesto la ni?a, pero mientras lo dec?a, la ni?a bailaba y hacia todos los gestos caprichosos de un trasgo,cuyo pr?ximo antojo pudiera ser el desaparecer volando por la chimenea. -eres de ver?s mi hija?- exclam? hester. La interrogacion no fue hecha al acaso, sino con cierta seriedad...... Su madre a veces se preguntaba si no estar?a enterada de la ?poca oculta de su viva.
-si,soy tu peque?a perla
Tu no eres mi perla!- dijo la madre, medio en verdad, medio en broma.... -dimelo tu madre- dijo la ni?a poniendose ser?a y pegandosele a las rodillas a Hester-
-te env?o tu padre eterno contesto Hester-
pero lo dijo con una inseguridad tal que no escap? a la ni?a, la cual ya fuera inducida por su capricho o por un esp?ritu mal?fico levant? el dedo,y toc? la letra escarlata-el no me env?o, yo no tengo padre eterno...
Hab?a decidido que la pobre perla era el producto del demonio, como esos seres que eran enviados a la tierra mediante el pecado materno siguiendo fines protervos. Lutero, seg?n el esc?ndalo de sus enemigos los monjes, era el hijo de esa raza infernal...

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